Presentación

Bienvenido a Ciencia / Science / Scientia, un espacio para curiosos, científicos, estudiantes, artistas, educadores y locos por la ciencia, en general.

Si eres una mente inquieta, si sospechas que una célula madre no es la madre de todas las células pero no lo tienes del todo claro, si no acabas de comprender qué demonios es un Bosón de Higgs o te tortura el no entender muchos de los diálogos que aparecen en la serie Big Bang, éste es tu sitio.

La ciencia puede ser realmente alucinante, divertida y fascinante. Quédate para descubrirlo. Y déjanos tu opinión, comentarios y sugerencias.


Blog de Maite Macía: @CienciaAsturias, @mairad02

15 mar 2013

Nuevos datos apuntan a que Higgs estaba en lo cierto

La ciencia y la religión han sido de nuevo protagonistas en esta semana en la que se han presentado en Italia nuevos resultados que parecen confirmar que la partícula descubierta el año pasado es, efectivamente, la llamada “Partícula de Dios”, y en la que se ha visto humo blanco saliendo de una de las chimeneas más famosa del Vaticano anunciando que un hombre de ciencia (estudió química) es el nuevo Papa de millones de fieles de todo el mundo.


Foto: Higgs en Ginebra / Fuente: CERN

Como lo prometido es deuda, en esta -si me lo permitís- “semana de Dios”, hablaremos deL Papa Francisco (antes cardenal Jorge Bergoglio) la ciencia del cónclave y del “Habemus Papam”, pero dejaré lo segundo para otro día y me centraré hoy en lo primero: los resultados preliminares que un grupo de científicos del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) presentaron ayer en Italia, tras analizar los datos recopilados en el año 2012. Todos parecen apuntar a que la nueva partícula hallada es el bosón de Higgs, una partícula asociada al mecanismo que da masa a las partículas elementales (ver el post: http://lacienciamasalucinante.blogspot.com.es/2012/11/cientificos-revelan-lo-ultimo-sobre-la.html y anteriores), y cuya detección es tan infrecuente que solo se produce alrededor de cada billón de colisiones protón-protón. (Os recuerdo que en física de partículas, un bosón es uno de los dos tipos básicos de partículas elementales de la naturaleza).

Para comprobar si la partícula estudiada era o no un bosón de Higgs, los investigadores han analizado las interacciones del supuesto bosón con otras partículas, así como sus propiedades cuánticas. Según el portavoz del experimento CMS, Joe Incandela, no hay duda: estamos ante un bosón de Higgs. 


Resumen de las interacciones entre las partículas del modelo estándar / wikipedia

Y lo ha afirmado después de que los científicos hayan comparado un número de opciones del espín y la paridad de la nueva partícula encontrada, y todas hayan mostrado una preferencia hacia un espín 0 y una paridad positiva, características compatibles con la “Partícula de Dios”. Eso sí, falta averiguar de qué tipo de bosón de Higgs estamos hablando, es decir descubrir si estamos ante el bosón de Higgs del Modelo Estándar de Física de Partículas, o más probablemente, del más ligero de una serie de bosones predichos por algunas teorías que van más allá del Modelo Estándar. 

Para determinar esto último, los científicos deberán medir con precisión la tasa en la que el bosón se desintegra en otras partículas y compararla con las predicciones teóricas. Esto requerirá muchos más datos del LHC, lugar en el que participan más de 200 científicos de 10 centros de investigación y universidades españolas, dicho sea de paso. Esperemos que haya fondos para ello, porque solo el tiempo y la investigación nos resolverán más interrogantes en esta materia. Queridos lectores, buenas noches y buen descanso.


 
Fumata blanca anunciado nuevo Papa / Vaticano
 
 La frase del día

"Hay palabras que suben como el humo, y otras que caen como la lluvia."
Sévigné, Marquesa de Sévigné (1626-1696)
 
Marquesa de Sévigné / wikipedia
 
 

8 mar 2013

Sobre divulgación científica, machos alfa y Up-Goer Five

Entender la ciencia no es imposible. El truco para conseguirlo es ponerle ganas y contar con la ayuda de alguien capaz de encontrar las palabras adecuadas para hacernos comprender esas maravillas que suceden a nuestro alrededor, modificando y condicionando a cada instante nuestras vidas sin que seamos plenamente conscientes de ello.

Ese alguien que debería ayudarnos a entender el universo, a nosotros mismos y todo lo que nos rodea, es un profesional que si bien existe, no siempre -o para ser sinceros, casi nunca- llega hasta nosotros. Se llama divulgador/a científico/a, y es una persona capaz de entender y comunicar en un lenguaje sencillo, y en el mejor de los casos, además ameno, lo que ocurre en las mentes de los científicos, así como en sus despachos y laboratorios.


Ciencia, investigación y divulgación / M.M.


Pero por desgracia, a este profesional rara vez se le contrata y, en vez de ello, se recurre al personal de plantilla de la empresa, y entidad pública o de otra índole que tiene otras prioridades y que, salvo honrosas excepciones, sabe de ciencia pero no de comunicación, o -lo más habitual- a la inversa. Y en el mejor de los casos, el resultado, sin ser desastroso, deja mucho que desear.


Más de un lector habrá estado tentado de llorar o de reír (mejor lo segundo) al escuchar, ver o leer algunas de las barbaridades que incluso medios de reconocido prestigio publican o emiten al informar sobre ciencia. No es de extrañar que se produzcan frustraciones y desencantos, y que la gente de a pie no entienda o rechace el trabajo de los científicos. Porque, nos guste o no, la ciencia no es sencilla, entre otras cosas porque maneja su propio lenguaje, más parecido a menudo a las matemáticas que a nuestras respectivas lenguas maternas. Y ocurre lo que ocurre...


 
Y prefiero decirlo con un toque de humor, porque si nos ponemos únicamente serios, tendríamos que preocuparnos y mucho, dado que nadie puede valorar lo que no conoce ni entiende. Y esta carencia comunicativa es una de las causas de que los presupuestos e inversiones en investigación y ciencia sean tan bajos. Porque no todo es culpa de la crisis económica mundial.

Un parasitólogo avispado se ha puesto las pilas y puede que saque buen partido de esta situación. Su solución al problema es un editor de texto, el Up-Goer Five, que obliga a los científicos que lo usan a explicarse con las mil palabras más comunes del inglés. Lo publicaba esta semana ABC.es. Os adjunto una muestra de cómo funciona el invento:
 
Por ejemplo, un ingeniero de software describe así su trabajo:
«Mi trabajo consiste en decirle a la computadora que haga cosas con palabras que pueda entender. La gente quiere que el equipo haga cosas por ellos para hacer más fácil, más rápida o mejor alguna parte de su vida. La mayoría de las veces, hay muchas maneras diferentes de contar a la computadora qué hacer, y algunas formas son mejores que otras. El ordenador hará exactamente lo que se le diga que haga, lo que es una buena cosa si piensas como una computadora y mala si no (...) A veces, las palabras que se indican a la computadora no están del todo bien, y tienes que averiguar por qué (...).

Las palabras en rojo son cosa mía, para hacer más evidente lo que salta a la vista -y casi la daña, en mi caso-. Pero no prejuzguemos y esperemos a ver los resultados. Os dejo la fuente y os invito, eso sí, a opinar y polemizar todo lo que queráis aquí en el blog y en el twitter: @CienciaAsturias.


El toque humano, ese gran toque. Os dejo con esta frase que se me acaba de venir a la mente. Y como es viernes y ya se acerca la primavera en el lugar desde el que os escribo (España), os dejo con una viñeta que he buscado expresamente para la ocasión. Gracias,  fantasmitas.com. Feliz fin de semana a todos.